domingo, 1 de julio de 2018

La producción mundial de gas y petróleo se desploma


El desplome energético convencional se desploma: los descubrimientos mundiales de petróleo y gas continúan disminuyendo hasta alcanzar su mínimo histórico en 2017.
A medida que el mundo continúa quemando energía como si no hubiera un mañana, los descubrimientos globales de petróleo y gas volvieron a caer a su nivel más bajo en 2017. Y para empeorar las cosas, la inversión petrolera mundial cayó un 45% desde su máximo en 2014. Si la industria petrolera mundial no aumenta significativamente sus gastos de capital, vamos a alcanzar el desplome (mayor demanda que oferta) de la energía procedente de fuentes convencionales no renovables mucho más temprano que tarde.
Según un artículo de Rystad Energy, los descubrimientos mundiales de petróleo y gas se redujeron a un mínimo de 6.700 millones de barriles de equivalentes de petróleo (BEP) [1]. En 2012, el mundo descubrió 30.000 millones de BEP frente a los 6.700 millones descubiertos el año pasado (Figura 1).
Figura 1. Modificada a partir de esta fuente.
En el informe, en el que se subraya que en 2017 se alcanzó el mínimo histórico de descubrimientos, Sonia Mladá Passos, analista senior de Rystad Energy dice: «No hemos visto nada como esto desde la década de 1940 […]. Los volúmenes descubiertos promediaron a unos 550 millones de BEP al mes. Lo más preocupante es el hecho de que el índice de reposición de reservas en el año actual alcanzó solo el 11%, en comparación con más del 50% en 2012». Según el análisis de Rystad, 2006 fue el último año en el que la tasa de reposición de reservas (la relación entre el petróleo que se extrae y las nuevas reservas que descubren) alcanzó el 100%.
La información crítica en la cita anterior es que el mundo solo reemplazó el 11% de su consumo de petróleo y gas el año pasado comparado con el 50% en 2012. Sin embargo, el artículo continúa diciendo que la última vez que los descubrimientos mundiales de petróleo y gas representaron el 100% del consumo se remonta a 2006. Por lo tanto, incluso con los precios altos de más de 100 dólares en 2013 y 2014, los descubrimientos de petróleo y gas representaron solamente el 25% del consumo mundial.
Como decía en el primer párrafo de este artículo, las principales compañías petroleras mundiales se han visto obligadas a recortar los gastos de capital para seguir siendo rentables y proporcionar un flujo de caja libre, lo que quiere decir que la inversión global de capital de la industria petrolera ha caído justo en el momento en que más se necesita. Según puede leerse en el EIA International Energy Outlook 2017 (la Biblia energética mundial publicada por la estadounidense Agencia de Información de la Energía) la inversión mundial de capital de petróleo cayó un 45% entre 2016 y 2014: 316.000 millones en 2016 versus 578.000 millones en 2014 (Figura 2). 
Figura 2. Modificada a partir de esta fuente.
En solo diez años (2007-2016), la industria mundial del petróleo gastó 4,1 billones para mantener y aumentar la producción. Sin embargo, como se muestra en la Figura 1, los descubrimientos mundiales de petróleo y gas cayeron a un nuevo mínimo de 6.700 millones de BEP en 2017. Por lo tanto, aunque se gasta más dinero, no se está descubriendo mucho más petróleo.
Por lo tanto, el mundo se enfrentará al desplome de la energía procedente de combustibles fósiles mucho antes de lo que algunos piensan. © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.

[1] El barril equivalente de petróleo (BEP) es una unidad de energía equivalente a la energía liberada durante la quema de un barril (158,9 litros) de petróleo crudo. El valor es necesariamente una aproximación, pues las diferentes calidades de petróleo tienen poderes caloríficos ligeramente distintos. Un barril medio de petróleo equivale a 1.700 kilovatios/hora y aproximadamente a 170 metros cúbicos de gas natural. El BEP es utilizado por las compañías de petróleo y gas para el balance de sus estados financieros como una forma de combinar reservas de petróleo y gas natural bajo una sola medida.