sábado, 2 de marzo de 2019

ExxonMobil se desangra con el fracking


La mayor empresa petrolera de Estados Unidos, ExxonMobil, se enfrenta a un naufragio financiero en su sector doméstico de petróleo y gas. La mayor parte de sus pérdidas se deben al desembarco de Exxon en la explotación de lutitas por fracking. Después de que Exxon adquiriera en 2009 un productor estadounidense de petróleo y gas de lutitas, XTO Energy, el gigante norteamericano comenzó a explotar a fondo el petróleo de lutitas en la cuenca Permian.
ExxonMobil planea expandir la producción de crudo de petróleo del Permian a 600.000 barriles diarios (BD) para 2025, desde un suelo de 115.000 BD en octubre. Si nos fijamos en la Gráfica 1, la producción de crudo Permian de Exxon se disparó desde menos de 50.000 BD a principios de 2018 a más de 115.000 BD en octubre. Exxon es ahora el operador más grande en el Permian.
GRÁFICA 1

Según este artículo de Bloomberg: «La escalada de Exxon en el Permian es esencialmente una apuesta de que puede perforar pozos tan baratos que serán rentables a pesar de la caída del precio del crudo desde principios de octubre. La compañía dice que sus pozos de lutitas pueden obtener beneficios de dos dígitos con el precio del crudo a sólo 35 dólares por barril».
Exxon se trasladó al Permian para frenar una década de caída de su producción doméstica de crudo convencional. Sin embargo, su afirmación de que disfrutará de ganancias con ese precio del petróleo puede que resulte ser más un delirio que una realidad. Los analistas de SRSrocco Report han estado estudiando los resultados financieros de Exxon en 2018 y los datos no son precisamente alentadores.
Aunque Exxon disfrutó de 20.800 millones de dólares en ingresos netos en 2018, la mayoría de sus beneficios procedieron de sus operaciones internacionales. Por ejemplo, los ingresos totales de Exxon en Estados Unidos fueron de 6.300 millones en comparación con los 17.100 millones de beneficios internacionales. Para que les cuadren las cuentas: del total de 23.400 millones de ingresos domésticos e internacionales de Exxon hay que descontar 2.600 millones de costes corporativos y financieros, de donde resultan los mencionados beneficios de 20.800 millones de dólares.
A pesar de que los ingresos estadounidenses de Exxon representaron un poco más del 25% del total de ganancias el año pasado, su sector de producción de petróleo y gas doméstico sólo representó el 7% de los beneficios totales de la compañía.
Para tener una idea de lo mal que van las finanzas del petróleo y el gas de Exxon en Estados Unidos, debemos entender que los datos financieros tienen tres componentes comerciales separados:
1) UPSTREAM: exploración, perforación y producción de pozos de petróleo y gas.
2) DOWNSTREAM: refino y comercialización de productos petrolíferos.
3) Chemical: producción y comercialización de productos químicos derivados del petróleo.
Si comparamos los resultados financieros upstream en Estados Unidos con sus equivalentes internacionales (Gráfica 2), podemos detectar fácilmente el problema. En 2018, los ingresos upstream de Exxon en Estados Unidos fueron unos míseros 1.700 millones en comparación con los 12.300 millones de sus beneficios internacionales. Eso es sólo una parte de las malas noticias.
GRÁFICA 2. Beneficios (earnings) de la exploración, perforación y producción (upstream) de pozos de petróleo y gas tanto domésticos (U.S.) como internacionales de ExxonMobil comparados con sus gastos de capital (CAPEX) en 2018, cuando el precio del barril era de 65 dólares. Las cifras están en miles de millones de dólares (las comas son puntos).
Exxon obtuvo 1.700 millones de sus pozos de petróleo y gas domésticos empleando para conseguirlos 7.700 millones en gastos de capital (CAPEX: Capital expenditures). La GRÁFICA 2 arroja mucha luz sobre lo que dice Exxon de que puede obtener beneficios a 35 dólares por barril. Mientras que Exxon invirtió 12.500 millones de CAPEX en upstream internacional para producir 1.700.000 BD en 2018, gastó unos asombrosos 7.700 millones de CAPEX en el upstream doméstico que le suministraron tan solo 551.000 BD de crudo. Por lo tanto, Exxon gastó casi el doble de CAPEX por cada barril de producción de petróleo estadounidense versus suministro internacional de petróleo:
CAPEX de Exxon por barril de petróleo doméstico en 2018 = 38,16 dólares.
CAPEX de Exxon por barril de petróleo internacional en 2018 = 19,96 dólares.
Exxon gastó casi 6.000 millones más en el CAPEX del upstream estadounidense que lo que obtuvo de beneficios, mientras que el sector upstream internacional resultó básicamente equilibrado.
GRÁFICA 3. Los datos son los mismos que en la Gráfica 2, pero referidos a 2006 con el precio del crudo a 66 dólares por barril. En 2006, cuando el precio del petróleo era de 66 dólares el barril, un dólar más que en 2018, Exxon obtuvo 5.200 millones en ganancias upstream invirtiendo 2.400 millones de CAPEX. Además, sus ingresos internacionales upstream fueron de 21.100 millones frente a los 13.700 millones en CAPEX. Por tanto, el gasto CAPEX del upstream de Exxon en Estados Unidos creció unos 5.000 millones desde 2006 a 2018, mientras que su equivalente internacional disminuyó en más de mil millones.
Es cierto que Exxon obtuvo beneficios adicionales de sus divisiones de negocios downstream y chemical, pero si estamos comparando manzanas con manzanas, sus pozos de petróleo y gas de Estados Unidos consumen muchísimo más CAPEX que sus operaciones internacionales de upstream. Una vez más, el gasto más alto de CAPEX de petróleo y gas doméstico se debe a que la producción por fracking es mucho más cara.
GRÁFICA 4. Según el informe anual de 2006 de Exxon, los ingresos del upstream doméstico fueron más del doble de su gasto en CAPEX 
La situación pinta aún peor para Exxon si comparamos sus finanzas recientes con las de 2006, cuando el precio del petróleo era casi el mismo que el año pasado (GRÁFICA 4). 
GRÁFICA 5
Si sólo nos centramos en los ingresos totales de Exxon en Estados Unidos en comparación con su gasto en CAPEX en estos dos periodos, la diferencia es notable (GRÁFICA 5).
Observe a hora la Gráfica 6 y vea las diferencias de cada uno de los sectores de negocio de Exxon. Sus pozos de petróleo y gas en Estados Unidos son los líderes en pérdidas en el grupo. ¿Por qué? Porque Exxon invirtió el 72% de su CAPEX en sus pozos upstream de petróleo y gas en 2018 sólo para recibir el 27% de beneficios. En 2006, los ingresos upstream del petróleo y el gas de Exxon fueron del 50% del total de beneficios.
GRÁFICA 6
Está por ver si Exxon será capaz de obtener beneficios en el Permian a 35 dólares el barril. Si las cifras de arriba nos proporcionan alguna pista, dudo mucho que se beneficien de su participación en el esquema Ponzi del fracking de Estados Unidos. Para tener una idea de cuánto dinero está invirtiendo Exxon en las lutitas del Permian, echemos un vistazo a la Gráfica 7.
Como podemos ver, el CAPEX upstream de Exxon en Estados Unidos se ha duplicado desde 2017 para aumentar la producción anual de petróleo estadounidense en 36.000 BD. La mayor parte del incremento del CAPEX procedió de la perforación de petróleo no convencional en el Permian. 
GRÁFICA 7. cambios trimestrales en la producción de petróleo total de Estados Unidos en comparación con el gasto nacional de CAPEX upstream.
En esa gráfica podemos ver que el CAPEX upstream de Exxon en Estados Unidos se ha duplicado desde principios de año desde 1.200 millones (Q1: primer trimestre de 2018) hasta 2.600 millones (Q4: cuarto trimestre de 2018) para aumentar la producción en 60.000 BD. Un montón de dinero para lograr un aumento pírrico. Y es todavía peor cuando miramos otro año. Por ejemplo, Exxon sólo invirtió una media de alrededor de 750 millones desde el último trimestre (Q4) de 2016 al segundo trimestre de 2017 en sus pozos de petróleo y gas de Estados Unidos. Ahora, está gastando un CAPEX de más del triple por trimestre para aumentar su producción de petróleo en las lutitas del Permian.
Todo indica que a ExxonMobil le espera el mismo destino que a la mayoría de los productores de petróleo y gas de lutitas de Estados Unidos: perderá dinero para aumentar su producción nacional de petróleo. Por supuesto, Exxon puede ser más competitivo que los otros productores más pequeños, pero cuando Estados Unidos y la economía mundial empiecen a flaquear, los precios del petróleo también caerán.
Será interesante ver entonces los resultados financieros de Exxon en los Estados Unidos en los próximos dos años, especialmente si aparecen precios de petróleo más bajos. Exxon probablemente aumente su producción de petróleo en Estados Unidos GRACIAS Permian, pero con un coste considerable. Es decir, utilizará los beneficios de sus operaciones internacionales para compensar las pérdidas en el Permian. ¿Cuánto tiempo podrá continuar Exxon con en ese modelo de negocio de autocanibalización?
Curiosamente, el mismo tipo de disparate lo llevó a cabo BHP Billiton. Cuando BHP, la compañía minera más grande del mundo, pensó que podría obtener oro del plomo, decidió comenzar a invertir en lutitas en 2011. Durante los siguientes años, BHP invirtió 50.000 millones en sus operaciones de petróleo y gas de lutitas de Estados Unidos. Sin embargo, en 2017, BHP se dio cuenta de que estaba sentada en una pirámide tóxica de valores en lutitas, por lo que decidió hacer limpieza.
El año pasado, BHP vendió todos sus valores en lutitas estadounidenses con una pérdida neta de más de 20.000 millones. Por otra parte, a BHP le tomó bastante tiempo darse cuenta de que las lutitas eran un gran error. Por lo tanto, a Exxon le costará unos años antes de que haga la misma limpieza.
El sector de petróleo y gas estadounidense de ExxonMobil se dirige hacia un desastre financiero. El CAPEX en petróleo y gas doméstico ahoga sus ganancias. Si una de las compañías petroleras más grandes del mundo no puede hacer dinero haciendo fracking, ¿qué le aguarda al resto de los operadores? © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.