sábado, 11 de abril de 2020

En el súper, use siempre mascarillas


¿Mascarilla sí o mascarilla no? Depende. Si usted está contagiado o sospecha que lo está, utilícela siempre que comparta un espacio cerrado o esté cerca de otras personas tanto en su hogar como en los comercios o en su centro de trabajo. En el exterior no es necesaria, salvo si quiere mostrar respeto por las personas que la usan. En cualquier caso, nunca sobra y es imprescindible en determinados lugares públicos.

Investigadores de varias instituciones científicas finlandesas han utilizado un modelo generado por ordenador para simular la propagación de las pequeñas partículas virales que todos nosotros expulsamos cuando estornudamos. El modelo muestra cómo se propagan esas partículas en el aire en los pasillos de los supermercados

Recordemos que cuando una persona tose, emite dos tipos de partículas. La principal vía de transmisión directa de los coronavirus se produce a través de gotitas diminutas pero visibles expelidas al hablar, toser o estornudar. Como estas partículas son más pesadas, no permanecen en el aire y se depositan inmediatamente en las superficies o en el suelo, a partir de donde, de forma indirecta, el virus puede transmitirse a través de las manos o de objetos recientemente contaminados.

Los investigadores modelaron una situación en la que una persona tose por un corredor estrecho formados por los típicos estantes de los supermercados. Imagen: Petteri Peltonen / Universidad Aalto
La transmisión de virus entre humanos también puede producirse a través de aerosoles, unas partículas de pequeño tamaño casi invisibles que, como son más ligeras, pueden permanecer más tiempo en el aire. En ambientes abiertos y bien ventilados, como las corrientes de aire por pequeñas que sean las dispersan, no representan ningún peligro de contagio.

Pero según sugieren los resultados la nueva investigación este mecanismo de transmisión puede ser relevante en ambientes con una inadecuada ventilación como los que pueden presentarse en los pasillos angostos de algunos comercios.

Los investigadores simularon un escenario en el que una persona tose en el pasillo entre los estantes de un supermercado. Luego, el ordenador fue calculando lo que sucedía bajo diferentes condiciones de ventilación. Cuando la ventilación es escasa, descubrieron que una "nube" de aerosoles se dispersa formando un halo ligeramente alejado de las proximidades de la persona que tose que va diluyéndose a medida que se extiende. Pero, aunque se disperse, ese proceso dura varios minutos y, mientras tanto, una persona que camine sin mascarilla entre los estantes podría, en teoría, inhalar las partículas pequeñas.

Es un modelo muy importante y tiene mucho sentido. ¡Cuando entras en el pasillo de una tienda puede que haya un enemigo completamente invisible! ¡Protégete y protege a los demás!

Recomendaciones dentro del supermercado

Antes de entrar en detalles, es importante tener en cuenta que actualmente no hay evidencia de que la nueva enfermedad, COVID-19, se transmita a través de la ingestión de alimentos. Hasta donde sabemos, la enfermedad parece propagarse principalmente de persona a persona a través de partículas de virus que se transmiten cuando alguien tose o estornuda.

Los objetos contaminados por el estornudo de otros pueden transmitir el virus si alguien toca ese objeto, remueve las partículas de virus de la superficie (en la que puede ser viable durante unas horas) y luego se toca la boca, la nariz o los ojos.

Para prevenir esos modos de transmisión, muchos comercios están tomando precauciones especiales de seguridad higiénico-sanitaria, como limitar el número de personas permitidas en el local al mismo tiempo, desinfectar los carros y las superficies que se tocan con frecuencia, colocar cintas o marcas en el suelo para ayudar al distanciamiento social y modular los horarios.

Pero todavía hay cosas que los clientes podemos hacer para reducir la propagación del coronavirus y el riesgo de contagiarse en el local comercial. Dejo una pequeña guía de recomendaciones para hacer la compra durante la pandemia.

Antes de ir a comprar

Piense si realmente necesita ir de compras. Lo más adecuado es ir lo menos posible. Si solo necesita algunos artículos, intente aguantar con los que tiene y planifique una salida para comprar más cosas. El consejo es que compremos suficientes alimentos para una o dos semanas.

El reparto a domicilio puede ser una opción, pero no es accesible a todo el mundo y, cuando lo es, la alta demanda dificulta la gestión, por lo que hay que planificar con la antelación suficiente. Entregar los comestibles ayuda a reducir la cantidad de personas que entran en las tiendas y tocan los artículos, y ayuda a las personas a seguir las normas de aislamiento social. También ayuda a reducir la propagación del virus de personas infectadas que no muestran síntomas. Cuando se empiecen a hacer tests masivos, descubriremos que son legión.

Intente comprar fuera de las horas pico y compre tantos artículos como pueda en una sola tienda.

Haga la compra solo. Esto ayuda a reducir la cantidad de personas que van a las tiendas.

No vaya si tiene síntomas: es muy importante no ir de compras si presenta síntomas de COVID-19 (como fiebre, tos o falta de aire), o si cree que ha estado expuesto al virus. En estos casos, debe dejar su casa solo para ir al médico. Si necesita algunos artículos sean alimentos o no, pídale a un amigo o a otra persona que los compre y se los deje ante la puerta cerrada.

En la tienda

Desinfecte sus manos con frecuencia: usa el desinfectante para manos que los comercios han colocado en lugares accesibles antes de entrar a la tienda y después de salir.

Si el comercio no proporciona toallitas desinfectantes, lleve sus propias toallitas para usar en carros, canastos rodados y lectores de tarjetas.

Use una mascarilla. Esta recomendación está destinada a prevenir la propagación de COVID-19 de personas que ignoran que están infectadas por ser asintomáticas.

Cumpla con el distanciamiento social: como en cualquier otro lugar público, debe mantener una distancia de al menos metro y medio con los demás.

Toque solo lo que compra: trate de no tocar cosas si no va a comprarlas. Eso significa que no manosee muchos productos intentando encontrar el más maduro, por ejemplo.

Los guantes no son necesarios: salvo para los productos frescos como norma de higiene general, utilizar guantes en la tienda no es necesario porque los guantes se contaminan de la misma manera que sus manos. Lavarse o desinfectarse las manos antes de entrar y después de salir a la tienda es lo importante. Pero si prefiere usar guantes, use unos desechables y tírelos a la basura antes de subir a su coche, tan pronto como llegue a su casa si ha ido a pie o en transporte público.

No se toque la cara: evite tocarse los ojos, la nariz y la boca con los guantes usados o con las manos sin lavar.

Fuente
Cuando llegue a casa

Lávese las manos: debe lavarse las manos o usar desinfectante para manos después de manipular los envases.

No deje su comida fuera de su casa: aunque en las redes sociales se ha sugerido dejar los alimentos en el garaje o en el trastero durante tres días para matar el virus, es un mal consejo. No solo no está científicamente comprobado, también es un problema de seguridad alimentaria. Dejar comida afuera, en el garaje, el coche o el trastero, puede significar que la comida no se almacene a la temperatura adecuada para evitar el crecimiento bacteriano; y también puede aumentar el riesgo de plagas de roedores e insectos.

Enjuague sus productos: siempre es una buena idea, incluso cuando no hay pandemia, enjuagar frutas y verduras frescas con agua para eliminar la suciedad, los desechos y los pesticidas, y reducir los niveles de gérmenes transmitidos por los alimentos frescos.

No use jabón: no es necesario usar jabón o desinfectantes químicos en esos productos. El gel lavaplatos no debe usarse para lavar alimentos, ingerirlo podría provocar náuseas y malestar estomacal.

Lave las bolsas reutilizables: si usa bolsas de supermercado reutilizables, debe lavarlas después de volver de la tienda, ya sea metiéndolas en la lavadora o con jabón u otros desinfectantes para bolsas de plástico. Si no las va a utilizar durante algún tiempo, no hay que lavarlas, déjelas en alguna habitación donde no entre o en una terraza tendedero, por ejemplo. Pasadas dos o tres días el virus habrá perdido su capacidad infecciosa.

Recuerde siempre que el virus no es una pulga: no salta. Hay que tocar los objetos contaminados con las manos y luego llevarlas la boca, la nariz o los ojos, para que pueda contagiar. © Manuel Peinado Lorca. @mpeinadolorca.