Vistas de página en total

domingo, 15 de junio de 2014

Petróleo en Canarias o de cómo el ministro Soria nos vende la moto

La línea representa el meridiano de Greenwich
En Alemania y en Austria los ministros dimiten por haber plagiado una tesis doctoral. En España, algunos ministros parecen no haber aprovechado el bachillerato. El ministro José Manuel Soria  demostró sus conocimientos geográficos cuando, reprobando la ignorancia del presidente canario Paulino Rivero, declaró en rueda de prensa: «Le pediría (a Rivero) que no dijera disparates. Alguien le tiene que explicar lo que es el meridiano de Greenwich, que alguien le diga que pasa por una serie de países, entre ellos España, y que pasa también por Canarias». Se podría pensar que eran unas declaraciones apresuradas en una rueda de prensa, pero no es así. En el video que puede verse en este enlace, se reafirma en su convicción de que, efectivamente, el meridiano próximo a Londres pasa por el archipiélago natal del señor ministro. 

Fuente
En estos días, el ministro Soria se muestra un convencido defensor del proyecto de Repsol de perforar las aguas de Canarias a la búsqueda de petróleo, porque España «no puede permitirse renunciar a la exploración de estos recursos», unos yacimientos donde habría «mucho petróleo y de buena calidad». Las autoridades canarias están radicalmente en contra del proyecto, porque aseguran que pone en peligro la riqueza medioambiental de la isla y su principal sector económico, el turismo. Paulino Rivero ha dicho que el ministro «parece más un accionista de Repsol que un canario», lo que según el refranero podría traducirse en aquello de que «cuánto más se agacha uno [Soria] más se le ve el culo». Soria apoya las investigaciones sobre hidrocarburos porque asegura que, de dar resultados, «contribuirían a reducir la dependencia energética de España. Las estimaciones hablan de una bolsa de mil millones de barriles, lo que supondría contar con una fuente de hidrocarburos para los próximos 25 o 30 años». 

Bien, estas son las cifras que maneja el señor ministro: 1.000 millones de barriles para garantizarnos el suministro de 25-30 años. Vamos a analizarlas. No se preocupen, no hace falta tener la preclara inteligencia del señor Soria ni contar con la cohorte de asesores que le aconsejan. Basta con un abaco y unos datos muy sencillos.

Al exministro de Medio Ambiente,
Arias Cañete también le gustaba Repsol (Fuente)
En la página web del ministerio de Industria, Energía y Turismo que dirige nuestro amigo canario, pueden obtenerse los datos de consumo de petróleo en España. No parece que los técnicos del ministerio hayan hecho mucho esfuerzo en actualizarlos, porque son de 2011. Como los datos para 2014 no variarán mucho, utilicémoslos para nuestras cuentas: según esa web, en 2011 se consumieron en España 58,3 millones de toneladas, lo que significa que los españoles consumimos ese año 1.573.000 barriles diarios. Para los amigos de las cifras, como cada barril son 159 litros, en España se consumen cada día 250 millones de litros (el equivalente a 100 piscinas olímpicas llenas hasta los bordes), 10,4 millones de litros a la hora o 2.895 litros por segundo. 

Consumo mundial de energía primaria por regiones
y tipos de combustibles entre 1965 y 2011.
Fuente: Perfora, chico, perfora (Figura 2)
Estamos en la media mundial. La magnitud del consumo energético y la dependencia de los hidrocarburos resultan asombrosas: en equivalentes energéticos, los hidrocarburos representaron el 87% de los suministros energéticos en 2011 (Véase la figura adjunta). En una coyuntura de profunda crisis económica, con consumos energéticos amortiguados, el consumo mundial de petróleo durante 2013 ascendió a aproximadamente 32.000 millones de barriles, es decir un promedio de 87,6 millones de barriles diarios, lo que equivale a más de 161.000 litros por segundo.

Volvamos a nuestras cifras. Según los datos que maneja el señor ministro, en las aguas próximas a Canarias puede haber 1.000 millones de barriles. En una entrada anterior, ya establecí la diferencia entre recursos (volúmenes calculados a ojo de buen cubero) y reservas probadas. Como de costumbre, el ministro sigue fielmente a Repsol y ofrece los datos de los recursos, que desde que se inició la industria del petróleo, suelen ser muy superiores a las reservas reales, por lo general en un orden de magnitud entre 1,5 y dos veces mayores. Pero no seamos cicateros y concedamos al señor Soria sus mil millones (159.000 millones de litros) como si fueran reservas probadas.

Como en España se consumieron en 2011 1.573.000 barriles diarios, el consumo anual español ascendió a algo más 574 millones de barriles, de donde se deduce que las reservas canarias, aún calculadas hiperbólicamente, darían como mucho para 20 meses de consumo y no para los 20-30 años que calcula Repsol y repite el señor ministro. 

Pero una cosa es que alguien no razone y otra bien distinta que nos tome a los demás por tontos. Soria, la industria y los medios afines repiten incansablemente que encontrar petróleo en el suelo patrio contribuirá a “reducir la factura energética española”. Así sería si se nacionalizase la industria petrolífera española, nos declaráramos en “autarquía energética” y rompiéramos las reglas internacionales de comercio de crudo. Y es que usted no puede andar de aquí para allá vendiendo sus barriles. Los barriles se negocian en el mercado internacional al precio vigente, que en estos momentos está a unos 110 dólares por barril Brent. No importa si lo extrae y lo comercializa Repsol o el sursuncorda. Los españoles tendremos que comprarlo a ese precio salvo, claro está, que Repsol se transforme en ONG y le regale la producción a don José Manuel Soria.